miércoles, 28 de noviembre de 2012

El más buenorro

Pues no he tenido ni que pensarlo. El tío más buenorro de todas las series hoy por hoy es Eric de True  Blood. Lo saben los chinos (los de los procedimentales policiales sobre todo).


Tú mism@


Quicir, tíos buenos hay muchos en esta vida y actores ídem pues también, pero hablando de personajes de ficción masculinos o como teclearía Carrie Bradshaw frente a su ventana con su voz de pito en off:  "When it comes to fictional male characters..." en True Blood, la palpitante serie de Allan Ball, (guionista de Six Fit Under/A dos metros bajo tierra y American Beauty a su vez), el Sheriff Eric Northman encarna (de noche, -lo siento, a veces no puedo parar-) el concetto de sexy en estado puro. Tan puro y ario que podría ser el masculino de la chica esa que viene del futuro a venderte lejía si alguna vez los hombres fueran el target de anuncios de limpieza, cosa harto improbable (y van dos post seguidos mencionando anuncios de lejía, tengo que consultarlo con mi psicoanalista).



My heart belongs to daddy.
Eric es apuesto, arrogante (Is there any blood in my hair?), romántico, altivo, mordaz, valiente, cincelado a martillo por las diosas del Olimpo, que después podrían partir nueces sobre su abdomen con ese mismo martillo, el ouroboros de Bricomanía vamos. Además está sobradamente preparado para la vida, o la muerte, según se mire. Pa colmo es el socio capitalista de un garito super trendy y tiene una hija que rompe todos los moldes con madera de ídola.




Bill el Vampiro en comparación, es muy aburrido, tanto haciendo de bueno como de malo. En cambio el primer plano del Sheriff Northman espatarrao en ese trono, negro sobre rojo, oteando al personal con cara de estar de vueltísima de todo, es imponente. Y sí, el personaje está a la altura de la imagen y va mejorando con los años, que como tiene tantos, le ha dao tiempo seguro.




Hago chass y aparezco a tu lado (coña escandinava)


Lady Gaga, que es muy lista, se agenció al actor que lo interpreta, Alexander Skarsgard, para un videoclip en el que por exigencias del guión tenía que magrearse con él, joe, qué duro mari.



Es la vigésimo cuarta vez que me hace repetir la toma la tía esta. 


Como me he tenido que tragar el vídeo entero (7 minutos y algo) pa saber de lo que hablaba, tengo que decir que ha habido momentos que era como si estuviera viendo a Raffaella Carrá haciendo de extra en Barbarella. No creo que fuera intencionado.



Explota explótame expló revisited

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